La ansiedad se ve agravada por el estrés, por lo que el manejo de éste redundará con mayor eficacia en su eliminación. Los estimulantes como la cafeína, la nicotina y el alcohol deben evitarse, así como algunos medicamentos ya que pueden incrementar la ansiedad, por lo que se recomienda consultar con un profesional de la medicina en cuanto a efectos secundarios. En ocasiones, la ansiedad puede ser síntoma de ciertas enfermedades. Un chequeo puede descartar problemas de salud subyacentes.
También es importante la consulta con un profesional de la salud mental como un psicólogo clínico para que facilite unas pautas para hacer frente con éxito un trastorno de ansiedad, así como el aprendizaje de técnicas de relajación como la respiración abdominal, relajación muscular progresiva, meditación, etcétera, como parte del tratamiento.
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